

Huari se halla en las proximidades de lo que actualmente es la ciudad de Ayacucho, a unos 2.800 m sobre el nivel del mar. Tiene una extensión aproximada de 2 km2 y está formada por recintos rectangulares, dispuestos en bloques, que componen una rejilla irregular junto con las calles y caminos. Los recintos están cerrados por muros de entre 6 y 12 m de altura y contienen habitáculos que se elevan varios niveles sobre los patios abiertos. Tanto los muros como las construcciones están hechos de piedra. En las edificaciones más sofisticadas se empleaba piedra tallada y decorada.
Tiahuanaco, asentada en las tierras altas de Bolivia, comenzó a extenderse hacia la zona meridional de los Andes, mientras que Huari se expandió rápidamente para dominar la región central, desde Cuzco a Cajamarca. La construcción de estas ciudades rigurosamente planificadas (como Azángaro, Jincamocco y Pikillacta), que servían como centros administrativos provinciales en la mayoría de los territorios, permitió a la civilización Huari ejercer un control directo sobre una amplia área. Sus pobladores también construyeron numerosos canales de riego y plantaron sus cultivos en grandes bancales para obtener mejores rendimientos agrícolas.
La influencia de esta cultura puede apreciarse en la cerámica, tejidos y otros objetos artesanales. La cerámica se caracteriza por su vistosidad y elaboración;


Ubicación geográfica de las culturas andinas de Tiahuanaco y Huari (500- 950 d.C. aproximadamente).
Fuente: Enciclopedia Encarta 99.
No hay comentarios:
Publicar un comentario